viernes, 21 de abril de 2017

Una ballena que vuela

Esta semana ha sido propicia para Los años de la ballena. Han sido unos días de vientos huracanados, en los que el levante, tan típico en las playas en las que embarrancó en su día cierto cetáceo, ha martirizado a árboles, carteles, contenedores y lacrimales, sin embargo no ha impedido que Los años de la ballena vuele alto, como nunca habría imaginado.

Hoy he participado en dos encuentros con alumnos del Instituto de Educación Secundaria Ciudad de Hércules de Chiclana de la Frontera, donde he disfrutado de su interés, complicidad e interesantísimas preguntas. Siempre disfruto en los encuentros con alumnas y alumnos, lo confieso. Es una de las actividades a las que dedicaría más tiempo si tuviera oportunidad. Descubrir la profundidad de sus reflexiones tras la lectura de tu obra no tiene precio, os lo aseguro, y hoy de nuevo me lo han demostrado con creces.


Pero además de eso, durante los pasados días 18, 19 y 20 he participado activamente en la coordinación del Primer Encuentro Multidisciplinar sobre el Bienestar en la Universidad de Cádiz.



Ha sido una ocupación llena de satisfacciones por los temas tratados, por la cantidad de aportaciones interesantes y por las relaciones humanas con los ponentes y demás asistentes. Además he tenido la oportunidad de desarrollar una ponencia en el encuentro: El bienestar en los personajes de Los años de la ballena, algo que, como decía al principio de estas palabras, nunca habría podido imaginar. 


Por si deseáis oírla, os pongo aquí el enlace a la ponencia.

Antonio Díaz

Para ver el vídeo, pincha aquí:



Más enlaces:

Noticia en Canal Sur TV: https://youtu.be/GoDmq-j3U9k

Entrevista a José Antonio Hernández en RNE: https://www.youtube.com/watch?v=hkcPmnOWNR4









sábado, 4 de febrero de 2017

La Casería

Hace ya varias semanas fui invitado por Alejandro Díaz a poner texto a una imagen del fotógrafo de San Fernando Ignacio Escuín dentro de una serie de colaboraciones con varios escritores para Patrimonio La Isla, textos inspirados en imágenes de Ignacio de los lugares más emblemáticos de La Isla. Para mí fue un honor porque a los dos, tanto a Alejandro como a Ignacio, los admiro con todo mi respeto y cariño. 

El trabajo en este caso debía inspirarse en la imagen que podéis ver mas abajo, parte de la playa de la Casería en San Fernando, un lugar pintoresco que disfruté en mi infancia y que aún visito a menudo. 

Aquí podéis ver la entrada en su publicación original. Espero que os guste.





Aquel día tenía algo de solemne, algo había en el aire que elevaba los sentidos. Quizás fueran las manos huesudas de Lele cepillando un tablón -imagen digna de Nuevo Testamento- para cambiar el banco de su barca. Quizás fuera el sonido de la cuchilla afilada produciendo aromáticos rizos de madera. Quizás fuera la brea con la que calafateó más tarde el costado de su barca, brea que parecía haber huido deshilachándose y formando nubes en el cielo. Quizás fuera el sol cayendo, ruborizándose al rozar el istmo hacia Cádiz. O el levante ausente, regalando treguas desde su escondite… Lele sabía que aquel día tenía algo de solemne, pero no sabía qué.


Se sentó en el escalón de su caseta y encendió un cigarrillo. Unas gaviotas garabatearon el aire con gritos infantiles. Lele se miró las manos y apreció por primera vez el parecido con las de su padre. Alguna viruta traviesa saltó de sus dedos al papel de fumar. Cruzó los brazos sobre sus rodillas y recreó su vista en la bahía. Aún no sabía por qué, pero en el aire flotaba la solemnidad.


Fotografía: Ignacio Escuín            Texto: Antonio Díaz González

domingo, 29 de enero de 2017

Café con Autor en San Fernando




El pasado jueves, en San Fernando, disfrutamos de una tarde entrañable alrededor de Los años de la ballena. Se trató de uno de los encuentros de la serie Café con Autor, dirigido por Remedios López. Estos actos consisten en la lectura previa de un libro por parte de las lectoras de un club de lectura y el tratamiento posterior de los entresijos, sensaciones y emociones que la novela ha aportado a cada una de esas lectoras, todo ello acompañado de un buen café y unas riquísimas pastas, algo que se agradecía el pasado jueves, un día lluvioso y frío que ayudaba al recogimiento y la búsqueda del calorcito humano.

Reme, como buena anfitriona, comenzó dándonos la bienvenida transmitiéndonos la filosofía de total independencia del Café con Autor con respecto al local donde se desarrolló el encuentro, la sede del Partido Popular de San Fernando, algo que, aunque ya dábamos por sentado, agradecí personalmente. Esta sensación la confirmé enseguida al percibir la variedad y riqueza de las asistentes a través de sus preguntas, reflexiones y procedencias. Esta circunstancia, en una sociedad que a veces nos resulta tan polarizada y crispada, me resultó tan sabrosa como la misma merienda.




En las muchas presentaciones y encuentros con lectores que he tenido con motivo de esta novela, siempre me han sorprendido la cantidad de conclusiones interesantes que se extraen de su lectura. A veces pienso que ya no puedo sorprenderme más, pero este Café con Autor me demuestra de nuevo que la riqueza del debate de una novela la da la aportación de cada lector con sus vivencias particulares. En esta ocasión no iba a ser menos. Desde el primer momento surgieron interesantísimas preguntas sobre el proceso de creación, anécdotas sobre su lectura, sobre el lenguaje utilizado por Marta, sobre los lugares recorridos por sus personajes, el origen de las distintos pasajes, la veracidad de los hechos históricos que se citan, etc.


Previamente tuve miedo de no estar a la altura porque la tarde anterior había pasado por el quirófano para una artroscopia de rodilla. Aún estoy convaleciente, pero ese día no podía faltar a la cita. Entre Don Nolotil y yo formamos un buen equipo. El debate nos enriqueció a todos. No hay nada como unir convivencia, respeto, reflexión y literatura. Espero tener otra oportunidad para compartir de nuevo tan buena experiencia con este grupo. Mi más sincero agradecimiento a Remedios por su invitación, al Partido Popular de San Fernando por la cesión de su local para esta actividad y a todas las lectoras participantes. Gracias de todo corazón.

Antonio Díaz González